Que si cada que finaliza algo hay que ponerse solemne y "reflexionar", en fin de año cunden numerosos actos de este estilo. A veces, hay que admitirlo, las reflexiones son incompletas, superficiales o demasiado autocompasivas, y lo que es peor, al instante siguiente de invocar a la paz, el amor y la superación, volvemos a ser los seres obstinados y cuadradotes de antes.
De alguna forma se vuelve difícil evitar que sea sólo verborrea echada al olvido en breve, porque combinamos celebración con introspección, mismas que son, me parece, como agua y aceite. Cabe reconocer que es casi una condición humana generalizada el hecho de que nuestros aprendizajes y propósitos más trascendentes son aquellos que tenemos en los momentos de fracaso y de dolor; de alguna forma, la dicha no es el más grande motor del cambio profundo, estando abajo es donde mirar hacia arriba tiene mayor sentido.
Sin embargo, antes de hacer promesas banales o deseos vacíos, sí me gusta realizar esta revisión de cómo fue el año y qué espero, por consecuencia mas no por ilusión, del 2016. Gracias a mi 'Filosofía del Rubberneckin'', mi aventura blog surgida justo este año, mi labor de retrospección es más sencilla y a la vez más cuidadosa en el sentido de no dejar detalles olvidados.
Este año fue intenso y crucial en diversos aspectos de mi vida: decisiones tomadas y desechadas, acompañantes fugaces y aún presentes, una observación constante más significativa de mis emociones, sentimientos, conocimientos y deseos, atravesando etapas donde 'dejarme llevar' y 'dejar ir' fueron frecuentes incidencias que terminaron transformándose en mis más recordadas experiencias.
En lo familiar, mi 2015 fue tiempo de puntos álgidos y retos que me hicieron temer e intentar entender cómo funciona este vínculo en los momentos difíciles; cuando se trató de salud y convivencia con gente tóxica, mi familia pasó por procesos para hallar el equilibrio y el ánimo de seguir adelante. No ha sido fácil, tenemos el anhelo de apartarnos del entorno insalubre para una vida más tranquila, y enfocarnos en construirlo dentro de nosotros primero, es un proceso que aún no termina.
En lo escolar, logré mantenerme en un andar con altibajos, puesto a prueba en mayores escalas y bajo la sombra del "pudiste hacerlo mejor" me conduzco a saber en qué área habré de especializarme, dando golpes de timón en varias de las que creí consolidadas. Tampoco ha sido un asunto sin dificultades, y he debido recordar alegrarme por ello, ya que fue justo lo que quise desde el principio, una profesión que me desafiara en muchos aspectos, conservando mi capacidad de asombro ante lo que es posible lograr. Fue un año de metas cumplidas también, acredité lectura en Francés, viví la trascendental experiencia del seminario y mi solicitud de carrera simultánea fue aceptada, en el año siguiente me esperan muchos más conocimientos de la matemática pura, teniendo a la vez mayor cercanía de titularme por la culminación de mis estudios en la matemática actuarial.
Laboralmente, 2015 fue de mis mejores años, tuve más experiencias de las que esperaba, desde seguir haciendo pininos en voluntariados de enseñanza de las matemáticas y continuar apoyando en la tienda de regalos que me otorgó mi primera oportunidad de trabajar, hasta haber viajado y tenido memorables aventuras siendo staff en conciertos de jazz, además de comenzar desempeñándome como auxiliar en el manejo estadístico básico en computadora, aprendiendo mucho en una tarea gradualmente más vinculada con mi área de formación. Ha sido toda una bendición el poder ganarme la confianza y la buena referencia de quienes he apoyado, probando mi capacidad de transmitir conocimientos, retener en mi memoria, tratar a la gente, hasta mi condición física y demás habilidades. Entre todos los roles laborales que tuve este año surgió gran cantidad de satisfacciones en mi anhelo de ser útil para quien me necesite. En ese aspecto planeo mi servicio social para el 2016, de manera que observaré con mayor atención mi campo laboral, responsabilidades más complejas estructurarán mis nuevos empleos, sé que aún tengo mucho por descubrir.
En mis relaciones afectivas, este año fue testigo de todo un vendaval para mí: un noviazgo que llegó a su fin, conocer más personas y todo el enredo que esto implica, una relación tormentosa donde encontré mis más antagónicas debilidades, una reconexión con mi soledad, la exploración laberíntica del deseo y en general, a través de todas estas etapas, una constante reconstrucción de mi forma de pensar, sentir y juzgar.
Las personas que conocí y el tiempo que compartimos aportaron en quien soy ahora, aún cuando fuera sólo un momento, o sólo con una intención, conformaron la parte de mi historia como individuo, no como hijo, ni alumno, ni trabajador, sino como alguien que, siendo cuerpo y alma, fue por convicción amante, compañero en el ámbito sexual para la fortuita y deseada ocasión. Descubrí placeres aprendiendo a separar sentimientos y derribar prejuicios, también fueron fuentes de aprendizaje sobre la vida en diferentes perspectivas. Agradezco la fortuna de su grata compañía, sin importar qué tan concreta fue su estadía, deseando lo mejor en sus caminos y que, con algo de suerte y mutua voluntad, coincidan de nuevo con los míos.
El transcurso de ese ámbito sentimental y emocional no fue tranquilo y estable en todo momento, como todo buen vendaval, azotó, lastimó, dolió y confundió, principalmente cuando los pies no tocaban el suelo. Cometí errores, y el tiempo me enseñó que, en efecto, no hay marcha atrás. No es algo que me mantenga en constante agobio, sin embargo, no deseo simplemente olvidar y repetir las experiencias no deseadas con nuevas personas. Quiero seguir aprendiendo a brindarme y blindarme a la vez, no dejar en saco roto lo que aprendí en cada instante adverso, saberme seguro y asertivo es algo que he ido logrando, pero que, como en tantos otros aspectos, hay más por mejorar.
Dentro de todos los aspectos ya mencionados, hay uno sumamente importante: el lograr conservar y valorar las amistades que en este año se han mantenido es algo invaluable, buscaré seguir siendo un apoyo significativo para mis amigos pues sé que sin ellos, no habría sido capaz de obtener las mismas satisfacciones que tuve, ni de aprender con una más amplia perspectiva de las equivocaciones que formaron parte de mi propia construcción, pero sobre todo, no hubiera sido igual de divertido reirse de cada detalle que valió la pena compartir.
Dentro de todos los aspectos ya mencionados, hay uno sumamente importante: el lograr conservar y valorar las amistades que en este año se han mantenido es algo invaluable, buscaré seguir siendo un apoyo significativo para mis amigos pues sé que sin ellos, no habría sido capaz de obtener las mismas satisfacciones que tuve, ni de aprender con una más amplia perspectiva de las equivocaciones que formaron parte de mi propia construcción, pero sobre todo, no hubiera sido igual de divertido reirse de cada detalle que valió la pena compartir.
En su totalidad, estos procesos de aprendizaje y crecimiento personal seguirán haciendo modificaciones en mi propio ser, siendo responsable de no cambiar el sentido progresivo sin importar las circunstancias, creo que mi mayor propósito, sin pretensión de que las cosas buenas se cumplan para mí sin esfuerzo alguno, es que justo estos procesos sólo lleguen a su fin con el final de la vida misma, seguir aprendiendo, seguir logrando, ya sea ganando o perdiendo, hasta que deje de estar en el mundo tal y como lo conozco, hasta morir.
Y así es como termino contribuyendo con más de estos ridículos protocolos, en fin, somos así y no es malo ni mucho menos; si acaso fui incompleto, superfluo o autocompasivo, aquí estará mi blog para recordarme qué tanto visualicé y cómo lo propuse para, ya sabes, hacerlo mejor. Gracias, por otorgarme tu confianza y tu valioso tiempo en leerme aquí, mis más sinceros mejores deseos para tu andar. No sé que tanto depare el siguiente año, pero seguro serán más historias que tendré el placer de escribir y compartir.
Me despido con 'Borrowed Time' de Madonna, deseándoles un feliz y trascendente 2016
"...'Cause we're only here to love
like there's no tomorrow.
So let's live each moment like
our time is only borrowed..."
No hay comentarios.:
Publicar un comentario